por:<-julio el paciente->visita mi blog para mas sobre estos temas y tener mas informacion
La Diabetes Mellitus es una afección muy frecuente. Ocasionalmente produce síntomas desde su inicio y otras veces no presenta ninguno.
El diagnóstico precoz, permite establecer el tratamiento adecuado y evitar posibles complicaciones.
Esta enfermedad impide el correcto aprovechamiento de los alimentos que se ingieren, especialmente azúcares, debido a una carencia total o parcial de una hormona llamada insulina.
Una persona normal ingiere en su alimentación azúcares, proteínas y grasas.
El alimento es digerido en el estómago y absorbido en el intestino delgado.
Luego llega al hígado, donde una parte se transforma en glucosa, que entra al torrente sanguíneo y hace que el páncreas produzca insulina.
La insulina permite que la glucosa entre en las células y produzca calor y energía.
Diabetes Tipo 1
Se denomina Tipo 1 o "Insulinodependiente" a la diabetes que requiere administración diaria de insulina.
Es más frecuente en niños y adultos jóvenes.
Se produce porque las células del páncreas células insulino-productoras, que fabrican insulina, detienen su trabajo o producen cantidades insuficientes de la hormona.
Habitualmente, los síntomas aparecen bruscamente.
Los más comunes son: cansancio o debilidad, apetito exagerado (polifagia), sed intensa (polidipsia), micción frecuente (poliuria), visión borrosa o cambios de la visión; todos secundarios al aumento de glucosa en la sangre (hiperglucemia).
La pérdida de peso súbita, refleja bajos niveles de insulina y sumado a los otros síntomas debe alertar sobre esta enfermedad.
En el tratamiento se asocia un plan de alimentación adecuado, ejercicio físico y aplicación de insulina.
Diabetes Tipo 2
La diabetes Tipo 2 o "No Insulinodependiente", afecta habitualmente a adultos mayores de 40 años con sobrepeso. Esta es la forma clínica más común (90% del total de diabéticos).
En el tipo 2, las células insulino-productoras del páncreas producen insulina, pero el organismo no puede utilizarla adecuadamente.
Hay insulina, pero las células parecen no reconocerla, y la glucosa no puede entrar en los tejidos.
A esta incapacidad de usar eficazmente la hormona, se llama "insulinorresistencia".
Aquí, el páncreas está obligado a fabricar cada vez más insulina, sin alcanzar el efecto normal, por lo que aumenta el azúcar en la sangre (hiperglucemia).
La diabetes no insulinodependiente es una enfermedad hereditaria.
Se hereda la predisposición a presentarla y distintos factores la desencadenan.
Consejos útiles
Conozca sus niveles de glucosa en sangre. Compruébelos regularmente.
Sepa cuál debe ser su peso normal y manténgalo.
Aplíquese su insulina o tome sus medicamentos como aconsejó su médico.
Visite a su médico periódicamente.
Siga los consejos de su médico sobre dieta, ejercicios, medicamentos y control.
Lleve con usted la tarjeta que lo identifica como diabético; será muy útil en caso bajar bruscamente el azúcar de su sangre.
Si usa insulina, tenga siempre consigo un dulce, azúcar, fruta o glucosa para el caso de una hipoglucemia.
Y no olvide sus controles.
Mejorará su calidad de vida.
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